Resumen
Este artículo intenta mostrar que uno de los principales síntomas que marcan hoy la Iglesia católica chilena a través (y más allá) de los diferentes casos de abusos sexuales, de poder y de conciencia, es una crisis profunda de lo que el filósofo francés François Jullien llama la descoincidencia. Una descoincidencia que constituye, sin embargo, el corazón del gesto cristiano presentado como estructura de existencia para los sujetos creyentes. A partir de este marco teórico caracterizado por la descoincidencia, nos preguntaremos sobre la naturaleza de la crisis eclesial chilena y su relación con el clericalismo, y veremos cómo esta crisis puede abrir, para la Iglesia, nuevos posibles.